Constitución española de 1931: Diferenzas entre revisións

Contido eliminado Contido engadido
Liña 24:
|}
 
 
 
 
==TÍTULO VII: Justicia ==
'''{{Artigo|94}}'''
 
La justicia se administra en nombre del Estado.
 
La República asegurará a los litigantes económicamente necesitados la gratuidad de la justicia.
 
Los jueces son independientes en su función. Sólo están sometidos a la ley.
 
'''{{Artigo|95}}'''
 
La Administración de justicia comprenderá todas las jurisdicciones existentes, que serán reguladas por las leyes.
 
La jurisdicción penal militar quedará limitada a los delitos militares, a los servicios de armas y a la disciplina de todos los Institutos armados.
 
No podrá establecerse fuero alguno por razón de las personas ni de los lugares. Se exceptúa el caso de estado de guerra, con arreglo a la ley de Orden público.
 
Quedan abolidos todos los Tribunales de honor, tanto civiles como militares.
 
'''{{Artigo|96}}'''
 
El presidente del Tribunal Supremo será designado por el jefe del Estado, a propuesta de una Asamblea constituida en la forma que determine la ley.
 
El cargo de presidente del Tribunal Supremo sólo requerirá: ser español, mayor de cuarenta años y licenciado en Derecho. Le comprenderán las incapacidades e incompatibilidades establecidas para los demás funcionarios judiciales.
 
El ejercicio de su magistratura durará diez años.
 
'''{{Artigo|97}}'''
 
El presidente del Tribunal Supremo tendrá, además de sus facultades propias, las siguientes
 
a) Preparar y proponer al Ministro y a la Comisión Parlamentaria de justicia, leyes de reforma judicial y de los Códigos de procedimiento.
 
b) Proponer al Ministro, de acuerdo con la Sala de gobierno y los asesores jurídicos que la ley designe, entre elementos que no ejerzan la Abogacía, los ascensos y traslados de jueces, magistrados y funcionarios fiscales.
 
El presidente del Tribunal Supremo y el Fiscal general de la República estarán agregados, de modo permanente, con voz y voto, a la Comisión Parlamentaria de justicia, sin que ello implique asiento en la Cámara.
 
'''{{Artigo|98}}'''
 
Los jueces y magistrados no podrán ser jubilados, separados ni suspendidos en sus funciones, ni trasladados de sus puestos, sino con sujeción a las leyes, que contendrán las garantías necesarias para que sea efectiva la independencia de los Tribunales.
 
'''{{Artigo|99}}'''
 
La responsabilidad civil y criminal en que puedan incurrir los jueces, magistrados y fiscales en el ejercicio de sus funciones o con ocasión de ellas, será exigible ante el Tribunal Supremo con intervención de un jurado especial, cuya designación, capacidad e independencia regulará la ley. Se exceptúa la responsabilidad civil y criminal de los jueces y fiscales municipales que no pertenezcan a la carrera judicial.
 
La responsabilidad criminal del presidente y los magistrados del Tribunal Supremo y del Fiscal de la República será exigida por el Tribunal de Garantías Constitucionales.
 
'''{{Artigo|100}}'''
 
Cuando un Tribunal de justicia haya de aplicar una ley que estime contraria a la Constitución, suspenderá el procedimiento y se dirigirá en consulta al Tribunal de Garantías Constitucionales.
 
'''{{Artigo|101}}'''
 
La ley establecerá recursos contra la ilegalidad de los actos o disposiciones emanadas de la Administración en el ejercicio de su potestad reglamentaria, y contra los actos discrecionales de la misma constitutivos de exceso o desviación de poder.
 
'''{{Artigo|102}}'''
 
Las amnistías sólo podrán ser acordadas por el Parlamento. No se concederán indultos generales. El Tribunal Supremo otorgará los individuales a propuesta del sentenciador, del fiscal, de la Junta de Prisiones o a petición de parte.
 
En los delitos de extrema gravedad, podrá indultar el Presidente de la República, previo informe del Tribunal Supremo y a propuesta del Gobierno responsable.
 
'''{{Artigo|103}}'''
 
El pueblo participará en la Administración de Justicia mediante la institución del jurado, cuya organización y funcionamiento serán objeto de una ley especial.
 
'''{{Artigo|104}}'''
 
El Ministerio Fiscal velará por el exacto cumplimiento de las leyes y por el interés social.
 
Constituirá un solo Cuerpo y tendrá las mismas garantías de independencia que la Administración de justicia.
 
'''{{Artigo|105}}'''
 
La ley organizará Tribunales de urgencia para hacer efectivo el derecho de amparo de las garantías individuales.
 
'''{{Artigo|106}}'''
 
Todo español tiene derecho a ser indemnizado de los perjuicios que se le irroguen por error judicial o delito de los funcionarios judiciales en el ejercicio de sus cargos, conforme determinen las leyes.
 
El Estado será subsidiariamente responsable de estas indemnizaciones.